Bragas reales o Reales bragas
Bragas reales o Reales bragas
El viento juega muchas malas pasadas a las mujeres: ya colgamos hace unos meses un vídeo de la Duquesa de Cambridge en su intento de doblegar el vuelo de su falda.
Es evidente que cualquiera con una cámara en la mano no puede resistir la tentación si pilla la oportunidad de retratar unas reales bragas. Tiene más morbo que enseñar las de actrices o modelos, pues por su propia profesión unas, y su propensión a salir en la prensa a cualquier precio, las otras, estamos más acostumbrados a vérselas. Pero las de una princesa, ¿serán tán cándidas como se presupone a una princesa?, ¿serán “Princesa”? Pues ejemplos hay muchos por la red: sólo hay que buscar un poquito…
Duquesa de Cambridge
Contra esto, ¡ni el protocolo tiene solución!
¿O sí?
¡…unas buenas bragas de esparto, que no tienen gracia alguna!
¡El protocolo es una herramienta muy flexible que sabe encontrar para cada ocasión la solución ideal!