Clarito como el agua
En las grandes reuniones de grupos o países -G8, UE, OTAN- uno de los quebraderos de cabeza dentro de la de la complejidad de la organización, es la sala donde se van a reunir las diferentes delegaciones.
Tiene que ser un espacio grande, abierto, que permita remodelarse -ahora se dice, tunear- para cumplir con las exigencias de lo que allí se va a llevar a cabo: tiene que entrar una gran mesa a la que sentar, por el criterio a aplicar en cada caso, los cabezas de las delegaciones sin olvidar, que los técnicos que les acompañan también necesitan su sitio. Y se necesita traducción simultánea: de varios idiomas y a varios idiomas; y monitores para no perder detalle; micrófonos que funcionen sin problemas, buena luz, ambiente de trabajo… ¡Ah! y eso sin mencionar las banderas, las aguas, los carteles nominales, la documentación…
¡Y encima y además, a todos nos gustaría que quedase bonito!
Por eso, subimos hoy esta foto: es una reunión de los países de la Unión Europea. No le falta detalle, ¡¡y encima y además, es bonito!!
