El collar de la justicia: ¿dos o tres?
Vimos ayer en el blog que se había inaugurado el año judicial en una ceremonia con la pompa, etiqueta y protocolo que requiere un acontecimiento de tanta relevancia. Hablamos del guión del acto que se mantiene igual desde hace años. Vimos las novedades de este año y su reflejo en la prensa. Y vimos la etiqueta requerida: togas y frac. Y si nos fijamos bien en las fotos, también un collar.
Esta es la presidencia del acto de ayer y estos los tres collares a los que hoy les vamos a dedicar esta entrada: de izquierda a derecha, el presidente del Tribunal Supremo luce el Gran Collar de la Justicia; el Rey, el Collar de Justicia (o del Ministro de Justicia) y el ministro, el Gran Collar de la Orden de San Raimundo de Peñafort, del que ya vimos su características en esta entrada. Sólo con haber leído este pie de foto nos hemos tenido que dar cuenta de que algo raro hay…. ¿collar del ministro que se pone el Rey? Y esa es una polémica de años en la que no nos vamos a meter. Pero así es. De hecho, es relativamente reciente la “devolución” de este collar, que se custodiaba en el Ministerio de Justicia, al Tribunal Supremo. Fue Ruiz Gallardón en su reciente etapa al frente de este ministerio, quien lo entregó al presidente del Tribunal Supremo de entonces, Sr. Dívar, en enero de 2012.
La prensa en su día lo calificó de devolución (El Mundo y otros, al ser noticia de agencia); el ministerio, como “restitución“. Para entender un poco este lío nos vamos a tener que remitir a la historia. La mejor explicación al respecto es la de David Ramírez Jiménez en el blog Falerística: conviene leerla. Pero por si las moscas, os haremos un pequeño resumen.
El Gran Collar de la Justicia
Nos cuenta el Sr. Ramírez en su artículo que el collar entregado al Sr. Dívar no es el Gran Collar. Dicho gran collar es el que luce el presidente del Tribunal Supremo en los actos protocolarios solemnes -y la apertura del año judicial, lo es-. Así se especifica también en el Reglamento 2/2005, 23 de enero, de Honores, Tratamientos y Protocolo en los actos judiciales solemnes, en vigor en la actualidad :
TÍTULO IV
Uso de toga e insignias del cargo y uso de condecoraciones
Artículo 34. Del uso de toga, insignias y condecoraciones por los miembros de la Carrera Judicial.
5. El Presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo usará de ordinario el collar pequeño y, en los actos protocolarios solemnes, el gran collar de la Justicia.
Este es el gran collar que en la foto luce el actual presidente del Tribunal Supremo. Y que no ha habido que devolver porque ya lo custodiaba el propio Tribunal Superior.
El Collar de la Justicia (o del Ministro de Justicia)
El que se “devolvió/restituyó” en el año 2012 fue el Collar de la Justicia o Collar del ministro de Justicia, que sí: que sí estaba bajo custodia del ministerio. Pues, como su propio nombre indica, del ministro era. De este collar, David Ramírez Jiménez nos cuenta que como dada la costumbre de que los ministros de Gracia y Justicia luciesen collares en los actos solemnes de apertura de tribunales, siendo ministro Eugenio Montero Ríos (lo fue tres veces entre 1870 y 1873 y una cuarta entre 1882 y 1883) se incluyó en la redacción de la Ley Orgánica del Poder Judicial un artículo específico al respecto:
“Art. 210. El Ministro de Gracia y Justicia, cuando presida el Tribunal Supremo en pleno, ó su Sala de gobierno, lo que no podrá hacer cuando se constituyan en Sala de justicia, asistirá con toga, usando el distintivo que se establezca por disposición especial”.
En esta disposición -que fue Real Orden- “se estableció como distintivo del ministro del ramo un collar semejante al que usaba el presidente del Tribunal Supremo”.
Este es el collar: lo luce en la foto el presidente del Tribunal Supremo…..¡Menuda juerga! Si, efectivamente. Podía haber lucido el que le corresponde, el gran collar. Pero, prefirió el del ministro. Como también se aprecia en la foto, el titular de la cartera, el que luce es el collar de la Orden de San Raimundo de Peñafort. No sabemos a qué se debe la elección o el cambio. Aunque, podría ser que como aquel año, 2011, el Rey no pudo presidir la ceremonia -estaba convaleciente de una operación de rodilla- y el acto lo presidió el presidente del Tribunal Supremo,y éste decidiría guardar el gran collar y lucir el que habitualmente se pone el Rey para marcar la diferencia. ¡Cualquier lo sabe! Es la única vez en los últimos quince años que no se vio el gran collar en esta ceremonia.
Veamos algunas fotos de las últimas aperturas del año judicial. Salvo el mencionado año 2011, en todas las demás ceremonias Gran Collar de la Justicia lo lució el presidente del Tribunal Supremo, mientras que el Collar de la Justicia (o del Ministro de Justicia) lo lució el rey, ya fuera don Juan Carlos o don Felipe.
El tercer collar
En el reglamento de honores mencionado se habla de dos collares: collar pequeño y gran collar de la Justicia. ¿Es que hay alguno más? Si, en su origen se pidieron dos iguales. Uno debía ser más pequeño que el otro para uso corriente. Así lo explica David Ramírez Jiménez en el blog Falerística:
“El origen del Gran Collar de la Justicia, intrínsecamente vinculado al cargo de presidente del Tribunal Supremo de Justicia del Reino de España, está en la Real Orden de 20 de abril de 1844. Esta disposición fue inspirada por el entonces subsecretario del Ministerio de Gracia y Justicia D. Manuel Ortiz de Zúñiga ([1]), que mandó labrar este collar junto con otro collar más pequeño de oro que se debía de usar más comúnmente por el presidente del Tribunal Supremo. Esa Real Orden no aparece publicada en la Gaceta de Madrid ni en la Colección Legislativa de España y no será hasta 1846, siendo ministro del Gracia y Justicia el Excmo. Sr. D. Lorenzo Arrazola García ([2]), cuando se ordenó publicar una descripción artística de ambos collares (del Gran Collar y el collar pequeño), mediante Real Orden de 15 de marzo de 1846.”
De este collar pequeño nada se sabe. El autor del blog mencionado se pregunta si no se habrá perdido en algún cambio de sede o si hay alguno más similar o parecido al gran collar del que no se tenga noticia. ¡Leedlo! Es un estupendo artículo.
Y una cosa más. Para los curiosos, esta es la Gaceta de Madrid número 4205, de 20 de marzo en la que se publicó dicha Orden.
