Con cara de lunes

10 junio 2019

Llegó el lunes y hay que volver al tajo…¡así que al mal tiempo buena cara! ¡Aunque hoy la tengamos que pena da mirarla…!Como siempre, y antes de empezar la semana, vamos a ver qué hemos hecho la anterior y si lo que os hemos propuesto os ha gustado. Sobre todo para saber si elegimos bien los asuntos que contamos. Es lo más importante.

Los números de los lunes

Sin ser una semana de esas de decir que “nos hemos salido”, no hemos bajado tampoco de las 850 visitas de media. Nos parece una cifra buena. Teniendo en cuenta que se acerca el verano y que el cansancio del trimestre empieza a pesar, la atención que prestáis al blog es muy notable. Especialmente bueno fue el jueves -910 visitas- días después de la publicación del post del miércoles –los alcaldes de Londres– que es la entrada más vista de la semana. Las otras dos –el resumen del lunes y la sonrisa del viernes– no lo han hecho mal. Mejor la segunda que la primera…¡con lo que nos costó encontrar una buena risa entre las miles de fotos de la visita de Trump a la Reina de Inglaterra.

Precisamente esa visita es la que ha movido los post más antiguos. Habéis buceado por los archivos del blog para releer alguno de los más relacionados con este tipo de viajes y estos protagonistas. Lo más visto ha sido el post sobre el himno americano que subimos en abril de 2017. Eso estaba cantado…¡y tiene letra! Le sigue la entrada sobre los guantes y las 3 reglas básicas si te gustan los guantes, que interpretamos se debe a estos guantes blancos de Melania Trump en la cena de gala en Buckingham Palace. El modelo elegido, de estilo Jackie Kennedy, también los incluía. El que la reina Isabel II los lleve siempre puestos ya ni es curiosidad…

La tercera entrada más vista ha sido la de la Royal Family Order of Queen Elisabeth II: las cenas de gala en Palacio son perfectas para lucirla. Claramente, no han perdido la ocasión tampoco en esta ofrecida al matrimonio Trump.

Desde el lunes pasado

Es evidente que el acontecimiento protocolero de la semana ha sido el mencionado viaje. Siguiendo el habitual marco en el que se mueven se han cumplido los hitos de rigor: al presidente Trump le recibió la reina Isabel II en el Castillo de Windsor. Ese primer saludo es uno de los momentos más comentados: tras darle la mano, chocó puños con Su Majestad. ¡Con las tablas que tiene la reina ni se le movió un músculo!

Tras pasar revista a las tropas, Trump enfiló la vuelta dándole la espalda a Isabel II….¡la que se armó en las redes! El siguiente momentazo nos esperaba en la cena de gala en Buckingham Palace. Al brindis, el presidente le puso la mano en la espalda en un gesto muy de familiaridad y cercanía. De nuevo sonaron las campanas protocoleras a rebato. ¡Como con Michelle Obama!

Hubo también visita de Melania a un hospital de niños con los que jugó una partida aparentemente de algo similar a la petanca. Perfectamente ataviada para hacer deporte…

Y hablando de ropa… La mujer del presidente hizo alarde de vestuario: con motivo londinense a su llegada al país; de azul, rojo y blanco de bandera británica cuando bajó del avión en el aeropuerto londinense de Stansted;

… de amarillo y gasa para la cena con la Premier May…-sobre el que tampoco faltaron comentarios… y de rojo pasión, y con diseño británico, para la cena de gala que ofreció el matrimonio en la en la mansión Winfield residencia del embajador estadounidense en Londres, en honor al príncipe Carlos y Camilla.

Entre los hitos cumplidos están el almuerzo ofrecido por la reina a los Trump tras el que visitaron la Galería del Palacio para ver una exhibición con objetos históricos de Estados Unidos conservados en la Colección Real. No faltó el té de las cinco, porque eso no se perdona nunca, con el príncipe Carlos y Camilla en la residencia de Clarence House; ni la ofrenda floral en la tumba al soldado desconocido en la abadía de Westminster.

Entre los no cumplidos hay que destacar que Trump no se dirigió al Parlamento como si lo hicieron los presidentes Bush y Obama. El presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, le negó la intervención aduciendo que no se había ganado tal honor.

La visita se completaba con la asistencia a la celebración del 75 aniversario del Desembarco de Normandía. ¡Ese sí que es un acto protocolario! Nos lo vamos a reservar. Lo merece.