Con el banco azul a cuestas

Con el banco azul a cuestas

Con el banco azul a cuestas

Cambiar de partido en el gobierno, ya sea tras las elecciones o, como es el caso, tras una moción de censura, conlleva novedades en todas partes. A los habituales y evidentes nombramientos en los ministerios, en delegaciones y subdelegaciones, en el cuerpo diplomático o al frente de organismos estatales se suman los “físicos”…¡en el hemiciclo se juega a las sillas con el banco azul!

¿Qué es el banco azul?

A pesar de llamarlo banco, son sillones. Y a pesar de que decimos azul, son negros. Pero lo que todos sabemos es que el banco azul son los escaños que ocupa el gobierno tanto en el Congreso de los Diputados como en el Senado. Es siempre la primera de las filas del hemiciclo y tras ella se ubican los diputados del partido político en el gobierno.

El origen de esta bancada especial para el gobierno data de mediados del siglo XIX. Tras el motín de la Granja (1836) que obligó a la regente María Cristina de Borbón a acabar con el Estatuto Real de 1834 y a restaurar la Constitución de Cádiz, se discutía la idoneidad de la presencia de ministros representantes del gobierno en las Cámaras, Senado y Congreso. Parecía incompatible con la separación de poderes en los estados moderno. Se le dio unas vueltas al asunto y finalmente el entonces presidente del Consejo de Ministros, el liberal José Mª Calatrava, encontró la solución que parecía más aceptable:  reservar una fila especial para ellos, separada y claramente diferenciada de las de los representante populares. Y para que no hubiera lugar a dudas, se mandó tapizar los bancos que ocuparían los ministros del Rey en raso de color azul, que es el color de los Borbones. Así se diferenciaban bien del rojo de las bancadas reservadas a la soberanía nacional que proclamaba la Constitución.

Del banco azul de raso a la primera fila de piel negra

Desde entonces el término se ha quedado en la tradición parlamentaria española para referirse al gobierno de turno. Pero no sólo se refiere a las personas. Sigue siendo un lugar dentro del hemiciclo y sigue siendo de diferente color al resto. Los diputados se sientan por grupo parlamentario en los escaños: y es algo que negocian los grupos menores en cada legislatura, porque la visibilidad cuenta. Los dos grandes -PP y PSOE- ya hace tiempo que no varían. Derecha de la presidencia para el PP e izquierda de la misma para el PSOE.

Lo que se mueve es el banco azul. Los sillones -o escaños- que van a ocupar los ministros del nuevo gobierno se colocan en la primera fila delante de la zona que ocupa el grupo parlamentario.

En el primer escaño de la primera fila del lado de la derecha ya no veremos a Rajoy. Ni siquiera habrá una silla. Al mover el banco azul al lado izquierdo del hemiciclo, el sitio del presidente de Gobierno será el primer sillón de la primera fila de ese lado. A continuación de este primer puesto -y hacia la derecha- se sentarán los ministros por su orden. Encabezados por la vicepresidenta. Al ser más ministros -17 del gobierno de Sánchez, frente a 14 del gobierno de Rajoy- los últimos sillones negros ya estarán bajo las bancadas de los populares. El último de todos, donde estaban la vicepresidenta Sainz de Santamaría y el ministro Dastis, es ahora el escaño Pedro Duque.

Otros cambios por el banco azul

Estos cambios principales conllevan otros: hay que reestructurar los escaños del hemiciclo. Cuatro ministros son diputados. Dejarán su escaño dentro de la zona de su grupo para sentarse en la primera fila. Por ejemplo, lo más probable es que allí donde antes se sentaba la portavoz socialista Margarita Robles, ahora ministra, se siente la nueva portavoz, Adriana Lastra. ¡El típico juego de las sillas!

Por su parte, en la zona del grupo popular han salido del banco azul tanto el ex presidente Rajoy -que de momento conserva su acta de diputado-, como la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, o los ministros María Dolores de Cospedal, Rafael Catalá, Cristóbal Montoro y Juan Ignacio Zoido. Todos han sido reubicados en otras filas.
Como hemos comentado al principio, el banco azul se mueve. Y lo hace de la misma manera tanto en el Congreso como en el Senado:

   

Hemos esperado a ver el resultado del primer pleno tras los cambios para comprobar cómo quedaba el nuevo banco azul en el hemiciclo, pero, la verdad, sólo podemos decir una cosa al respecto…¡vacío!

 

 

 

(Foto: reina MªCristina;  hemiciclo; escaño Pedro Duque; Zoido; primer pleno; y propias)