¿Hablamos de cantidades (I)?

Calcular cantidades es trabajo de todo organizador. Calculamos “cantidades” de espacio necesario para los invitados, calculamos “cantidades” en horas para repartirnos las distintas labores, calculamos personal auxiliar de apoyo que necesitamos, calculamos tiempos para pautar llegadas con orden y vistosidad…. Y aunque no siempre sea necesario -pues es un trabajo que encomendamos a empresas proveedoras- calculamos cantidades de canapés, bocadillitos o bebidas. ¡Depende del acto y del papel que juguemos en él!

Así pues vamos a empezar con esta entrada una serie dedicada al cálculo de las “cantidades” que nos van a acompañar en nuestro evento. De la forma más sencilla que se nos ocurre y nada complicado. ¡No vamos a hablar de presupuestos! Eso es excesivamente complejo como para solventarlo con 300 palabras. Vamos a empezar por  “cantidades” de bebidas. Nos parece que es lo más práctico. Están al caer las fiestas de Navidad y muchos de nosotros nos vamos a tener que enfrentar -además de a nuestro trabajo- a la organización de fiestas familiares. “Cantidades” es palabra mágica en estos casos. ¿Cuántos vamos a ser? De ello depende que el cálculo lo hagamos bien. Si tenemos costumbre de repartirnos entre uno y otros la compra de lo que vamos a necesitar, ¡más nos vale llevar una lista de “cantidades” ajustada a la realidad! Si no, vamos a estar comiendo y bebiendo sobras durante semanas.

Ya comentamos en un post anterior sobre servir el vino las cantidades a tener en cuenta de este alimento -si, el vino es un alimento, líquido, pero alimento- según el tipo de menú elegido. También dimos unas pautas para servirlo dependiendo de si se iban a servir un único tipo o varios distintos.

Pero además de espumosos y vinos, con niños, abuelos y abstemios a la mesa, tenemos que tener en cuenta otras bebidas no alcohólicas. ¿Qué calculamos?

-una botella de agua por cada 3 comensales

-una botella de agua con gas para cada 6 comensales

-una botella de litro y medio de refresco para cada 5 personas

-un litro de zumo para cada 4 personas

Evidentemente, es mucha la casuística: hay quien se bebe el litro de agua entero él solito, porque en algún sitió leyó -o le contaron- que es bueno para el riñón. (Aunque en verdad, lo que es, es bueno para las embotelladoras de agua, que se están cubriendo pero bien, bien, el riñón con tanta botellita…).  También hay mucho “enganchado” a la cola, y por tanto, conviene tener prevista cierta variedad: light, cero, con cafeína… ¡que es fiesta, pero los niños tienen que dormir!

(Fotos: envases agua; agua con gas; refrescos de cola; refrescos; archivo propio)