
Haciendo de las suyas con las banderas y el luto
En el Pleno del Congreso de los Diputados del día 25 de marzo en el que los grupos políticos apoyaron la prórroga del estado de alarma, el presidente del Partido Popular, Pablo Casado, propuso en su intervención que:
«…las banderas oficiales ondeen a media asta mientras dure esta pandemia.
Y pido un funeral de Estado para todos ellos cuando superemos esta crisis, para
resarcir la soledad que han sufrido en sus sepelios».
(PDF de la intervención del Sr. Casado el día 25 de marzo en el Congreso de los Diputados)
Desde ese día el asunto de la bandera, la media asta y el luto se han convertido en elemento de discordia más con el que atizarse. Hay una especie de carrera a ver quien las pone antes, las tiene más «media astadas» o con más luto que los demás. De hecho, en sus ruedas de prensa o comparecencias posteriores a su intervención en el Congreso, enlutan «sui generis» las banderas que tienen a sus espaldas:
23 de marzo
30 de marzo
28 de marzo
Sin embargo y como ya hemos visto más de una vez en el blog, la declaración de luto requiere de un trámite y tiene unas formas. ¡Si se van a poner a ello, que se haga correctamente! Si no, queda como lo que parece…postureo.
La declaración de luto
Para ir aclarando conceptos, la bandera es un símbolo: el que representa a los pueblos. A todos y cada uno de los que los componen. Por eso su uso está regulado: existe una Ley 39/1981, de 28 de octubre, por la que se regula el uso de la bandera de España y el de otras banderas y enseñas, que garantizaría que ese uso fuera buen uso… Si no se regulara haríamos con ese símbolo común auténticas «maravillas».
Ante una tragedia los ciudadanos expresamos el dolor que sentimos mediante una serie de acciones: las que cada uno cree y opina que son las adecuadas al momento y al suceso acaecido. Cuando es un estado el que quiere mostrar ese dolor la herramienta que utiliza es la declaración de luto. En estas declaraciones el gobierno fija qué acciones son las que va a tomar para mostrar su dolor. Son, habitualmente,:
-la duración del luto;
-la disposición de la bandera nacional a media asta en el exterior de los edificios oficiales;
-la colocación de un lazo o crespón negro en las banderas de interior;
-y la suspensión de aquellas actividades oficiales que pudieran desentonar con el dolor general.
Y para que sea oficial se publica el correspondiente Real Decreto en el BOE.
La declaración de luto puede no ser estatal. Si lo declaran las demás administraciones –autonómica y local- cada uno de ellas decretará la duración y condiciones que éstas estimen oportuno. Y lo harán oficial publicándolo en sus respectivos boletines oficiales.
El luto en las banderas
Una vez publicada la declaración de luto, las banderas en el exterior se arriarán a media asta. El procedimiento es sencillo: se iza a tope y se arria hasta alcanzar la media asta. En el interior, las banderas se colocan en peanas. Miden 150 x 100 cm. y por tanto, no se pueden ni izar, ni arriar: arrastrarían por el suelo. Por ello, el luto en banderas de interior se manifiesta con un crespón negro, bien anudado en la moarra del mástil. No se prende en la bandera, por muy “televisivo” que sea el invento o por muy bien que salga en la foto.
Desde mayo de 2010, el nuevo Reglamento de Honores Militares RD 684/2010, en su artículo 3.2, refleja con claridad que,
2. No se rendirán honores, salvo los fúnebres, y la Bandera permanecerá izada a media asta ininterrumpidamente día y noche cuando el Gobierno decrete luto nacional por un periodo de tiempo determinado. De la misma forma se actuará en el ámbito de las Comunidades Autónomas, de las Ciudades de Ceuta y Melilla y en los municipios cuando el luto se establezca por sus órganos competentes.
Haciendo de las suyas con las banderas
Visto lo visto, y como el gobierno español no ha declarado el luto oficialmente, la bandera española no debería ondear a media asta en el exterior de ningún edificio oficial. Ni lucir crespón negro en la moarra de las banderas nacionales en el interior. Y menos aun lazos esmirriados pinchados con alfileres para que salgan bien por la tele.
¿Las banderas de las Comunidades Autónomas? Tampoco, salvo aquellas cuyos gobiernos hayan declarado oficialmente el luto en sus regiones. Lo ha hecho la Comunidad de Madrid: esto le permite arriar a media asta la enseña de la Comunidad, pero no la nacional. Ni la europea tampoco. Sólo afecta a la suya en sus edificios y en los de los municipios madrileños.
Medias astas y medios lutos en estos momentos no son, pues, más que una forma más de llenar páginas y ocupar espacios en los medios. Es evidente que la bandera, el símbolo, es un tema muy serio para los que trabajamos en protocolo. Y que estas actitudes iban a provocar la reacción de los profesionales. Se ha hablado y mucho del luto y de las banderas en blogs especializados y se han cruzado muchos tuits. Reproducimos algunos:
Y os recomendamos, si os interesa el tema, la lectura de cuatro post escritos por reconocidos profesionales: la doctora Dolores del Mar Sánchez ( sobre el luto y sobre la forma en que apareció la bandera española tras el presidente del Gobierno) y la de los profesores y blogueros Carlos Fuente y Juan de Dios Orozco.
(Fotos: Casado, sede PP; sede de la Comunidad de Madrid; capturas de pantalla de los TW de Julio Panizo y Carlos Fuente)