Las circunstancias mandan…
Ya sabemos que producir un acto es una labor que más que glamour, lo que tiene es mucha complejidad. Además de tener que saberse manejar en el mundillo de todo tipo de proveedores o de tener amplios conocimientos de logística, es fundamental ser resolutivos y capaces de buscar soluciones alternativas a todo tipo de imprevistos. Desde los más aparentemente sencillos a los más ingeniosos.
Si resulta que tenemos que lidiar, por poner un ejemplo, con un monarca que lleva muletas, habrá que pensar en que es más cómoda una silla alta que las de altura normal. ¡Cualquiera que tenga problemas de movilidad sabe que se levanta uno mejor de sillas con más altura! Tienen todo tipo de piezas para elevar sillones, camas, sillas o retretes en cualquier tienda especializada en enfermos!
Pero claro, una cosa es poner una caja de zapatos, una guía telefónica, un pedazo de madera o un alza de plástico a cualquiera que a un rey! ¡Además de ser ingenioso hay que tener estilo!