El minuto de silencio: una ceremonia de mañana
Tras cualquier desgracia que afecte a un país, una región o un pueblo es muy habitual que las instituciones convoquen un minuto de silencio. Hace ya un tiempo que hablamos de ello en el blog. Aunque en aquella ocasión lo hiciésemos precisamente por el no silencio de dicho minuto en los campos de fútbol. Hoy volvemos sobre ello. En esta ocasión no sólo para contar de dónde viene esa tradición sino para darle, además, otro aire. El del punto de vista del protocolo.
¿Es un acto?
¿Hay un guion establecido para estos actos? Lo es y sí, lo hay. Desde el punto estrictamente técnico, hay una convocatoria previa,
hay un lugar determinado para hacerlo visible,
hay una hora exacta y una duración concreta, hay una ordenación de autoridades, algo más laxa, pero la hay,
y hay un final.
¿Habrá, por tanto, una etiqueta?
¿Si te convocan a una boda, piensas lo que vas a ponerte ese día? Pues por respeto, al menos ese día deberíamos cuidar nuestro atuendo un poco. No es cuestión de ponerse justo ese día las bermudas con la camisa floreada si se tiene intención de participar, ni de tirar del chaqué de boda..….¿o si?
Es la reina Isabel II junto al Duque de Edimburgo durante el minuto de silencio por las víctimas de la tragedia del Manchester. Un acto que se celebró en la escalinata del Palacio de Buckingham que baja a los jardines. A las 12 en punto. Una solemne ceremonia de mañana a la que corresponde una etiqueta: chaqué para los hombres; traje de mañana para las mujeres. (También aquí).
Podrá parecernos anacrónico. Ya de por sí, las monarquías hoy, pueden serlo. Pero lo que está claro, es que esta reina y este sistema sobreviven. Y sobreviven tan bien, porque ofrecen un “pack completo” que tiene sentido. Las formas no están reñidas con nada.
(Foto: Europa Press; Reuters; eldiario.es; Dominic Lipinski/Pool Photo via AP)