En resumen: Wimbledon y la Constitución con agüita fresca
Las semanas cortas también se acaban y esta primera de mayo, con dos fiestas en el calendario, ha pasado volando pero ha sido muy intensa. Como todas las que tienen días festivos, también están llenas de asuntos protocoleros que dan para escribir sobre los diferentes aspectos de los actos. Aunque cabría pensar que serían las entradas dedicadas a los festejos madrileños las más vistas por nuestros seguidores y por tanto las que hoy brillaran en el resumen, ha resultado que nos hemos colado con las previsiones. Ni las medallas y condecoraciones de la capital, ni la ceremonia de entrega os han gustado lo suficiente como para auparlas al podio de ganadores.
Para el primer puesto de este ranking semanal, habéis preferido el tenis. El #TOP1concorona se lo habéis dado a la etiqueta del torneo de Wimbledon. En la entrada del jueves os contamos que los participantes en la competición están obligados a cumplir normas estrictas de etiqueta. Deben jugar vestidos de blanco. Con los años se han permitido algunas pinceladas de color, pero son mínimas. El origen de esta decisión se debe a la participación femenina en el torneo. Cuando ellas empezaron a jugarlo, y para no ponerlas en una situación indecorosa a los ojos de la sociedad de entonces, se decidió adoptar el blanco en sus atuendos. Es el color en el que menos se ven las manchas de la transpiración debida al esfuerzo.
En el segundo puesto de nuestro resumen se ha colado una entrada de diciembre. La que subimos el Día de la Constitución para compartir con vosotros el desarrollo o guión del acto conmemorativo anual por su aniversario. Es curioso que a estas alturas del año una entrada tan relativamente antigua -¡aunque estemos camino de alcanzar los 5 años en julio y entradas viejas hay a cientos!- haya trepado tan arriba. Pero las estadísticas no nos las hemos inventado:
Al tercer puesto se ha encaramado el agüita para el Papa. Vuelve a ser un comentario de éxito. Es el del viernes. ¡Ya tiene mérito, ya! Ha competido contra un segundo puesto que lleva desde diciembre rondando por el blog. La foto que dio pie al comentario es de la Plaza de San Pedro en el Vaticano. Para uno de los muchos actos en los que participa el Papa en la plaza se monta sobre su trono y para cubrir el altar, una especie de carpa pequeña, tipo cenador. Y allí, estratégicamente situado detrás del Monseñor Guido Marini, responsable de las celebraciones litúrgicas del Papa, hay un pequeño cajón de manera que esconde una copa con agua por si el Santo Padre tiene sed. ¡Un buen escondite para unas piezas imprescindibles en un acto!
Y este ha sido el resumen de este lunes: enfilamos otra semana más. ¡Veremos que nos depara!
¡Feliz semana a todos y gracias por estar ahí!