Sonrisa con recortable
Hemos llegado a la sonrisa. La primera tras las vacaciones. Y como las tenemos muy recientes, casi no nos hemos podido desprender del todo el contenido lúdico que ocupa gran parte de los periodos de descanso.
Por eso, el chip sonriente de los viernes se nos ha quedado enganchado en un “recortable”. Un juego al que pocos niños se resistían. Con unas tijeras y la hoja recortable las niñas jugaban a las muñecas, los chicos a las guerras, los manitas a las maquetas…. horas de entretenimiento barato e imaginativo: de los modelos que venían impresos a los diseños propios, sólo hay un paso. Montar escenarios bélicos para los oficiales recortados era situarles en un verdadero campo de batalla. De la pequeña maqueta de papel a la más elaboraba con madera y segueta… un poco de práctica.
¿Probamos nosotros a ordenar autoridades con las figuras recortadas de las nuestras? ¿Les vestimos como manda la etiqueta a actos imaginados. ¿Protocoleamos con tijeras y papel?
Buen fin de semana a todos y hasta el lunes.
(Gracias Diana Rubio. Nos pusiste en la pista)