Vestirse como manda el “protocolo”
Entre nuestras constantes peleas con los medios de comunicación sobre protocolo y etiqueta, la de la indumentaria es de las más persistentes. A vestir adecuadamente en cada tipo de acto al que asistimos lo llaman cumplir con el protocolo. (Aunque, la verdad sea dicha, también lo hace mucha gente).
La semana pasada estábamos todos pendiente de la visita de Obama a nuestro país: ¡protocolo y etiqueta a todo trapo en los medios! En el programa preparado para esos días había un almuerzo en el Palacio Real que los Reyes ofrecían al presidente estadounidense. Al efecto se cursaron las oportunas invitaciones y se informó que la etiqueta recomendada por la Casa del Rey a los invitados era «traje oscuro» para los hombres y«vestido corto» para las mujeres.
Y no sólo se recomendó a los invitados que acudiesen adecuadamente vestidos al acto, también a los periodistas que iban a cubrir el almuerzo. Aquí en nuestro país, esto de la etiqueta siempre es cuestión a discutir, caladero de chismorreos, y “chicha” para tertulias de radio y artículos de prensa. Pero en otros, y entre ellos, los Estados Unidos, no ir correctamente vestido se interpreta como una falta de respeto. “Vestirse adecuadamente para un acto es reflejo del respeto y del valor que dicho acto tiene para nosotros. No lo olvidemos”.*
Inmediatamente empezaron los medios de comunicación a sacarle punta al “protocolo”: ¿cumplirían esos políticos nuestros amantes de las mangas de camisa con esta recomendación?
No pudimos comprobarlo. Los acontecimientos de Dallas obligaron a la cancelación de parte del programa previsto. Incluido este almuerzo. Pero, como “chicha” es, los medios insistieron en el asunto. Y claro, tanto va el cántaro a la fuente que al final, “pillaron cacho”:
No tendré que vestirme como manda el protocolo (Pablo Iglesias)
*¡Ya lo dijimos aquí!
(Foto: clasedeperiodismo.com; elmundo.es; EFE)
