Indultar al pavo: ¿tradición de la Casa Blanca?
Como creo que ya sabemos todos, hoy, tercer jueves de noviembre, se celebra en los Estados Unidos y en Canadá, el «Día de Acción de Gracias”.
La tradición tiene origen en la celebración en Plymouth en 1621, que un grupo colonos británicos organizó para agradecer sus buenas cosechas del verano tras el duro invierno que siguió a su llegada a Nueva Inglaterra a bordo del Mayflower.
El primer día de Acción de Gracias en Plymouth por Jennie A. Brownscombe (1914)
Se hizo fiesta oficial de EEUU en 1787 a propuesta del presidente George Washington que estableció el 26 de noviembre como Día Nacional de Acción de Gracias para que los ciudadanos del nuevo país expresaran su gratitud por el fin de la Guerra de Independencia.
Pero fue Abraham Lincoln, en 1863, quién fijó una fecha más elástica: Acción de Gracias se celebraría anualmente en todo el país el último jueves de noviembre. Y así se hizo hasta 1939: ese año el último jueves de noviembre cayó en día 30 y, «ante la posibilidad de que la brevedad de la campaña navideña debilitara una economía que aún se recuperaba de la Gran Depresión, el presidente Franklin D. Roosvelt la adelantó al penúltimo jueves del mes».
La celebración reúne en torno a la mesa a las familias que durante el resto del año se ven poco y que, en sus inicios, era la única vez que lo hacía en todo el año. Es tradición cenar pavo relleno –además de asistir en Manhattan al desfile de Macys, casa comercial que lo financia, y ser el inicio de la temporada de rebajas con el famoso “black Friday” y sus impresionantes bajadas de precios- asado (stuffed turkey), servido con salsa de arándanos (cranberry’s sauce) y acompañado de puré de patatas (smashed potatoes), y algunas verduras, generalmente judías verdes (green bean casserole), en recuerdo de las penalidades que pasaron los primeros colonos ingleses (pilgrims) para sobrevivir tras su llegada al Nuevo Mundo.
Pero además de esta tradición hay otra, no menos peculiar, que es la de indultar al pavo: alguno hay que no acaba en el horno gracias al indulto presidencial en honor a esos primeros colonos de quienes fueron alimento imprescindible. La Federación Nacional del Pavo entrega todos los años desde 1947, un pavo al presidente de Estados Unidos para la cena de Acción de Gracias. Fue el presidente George Bush (padre) al que en 1989 se le ocurrió la idea de no cocinarlo e instauró la costumbre de indultarlos.
La ceremonia de indulto, la Annual pardoning of the National Turkey, es ya un rito que siguen con interés muchos americanos y que, como muchas otras, conlleva su ceremonial: no todos los pavos entran en el bombo de la salvación. Previamente hay que presentarse a candidato en otra curiosa ceremonia: la presentación al Presidente (Presentation of the National Turkey).
Para tener el privilegio de ver al presidente los pavos deben tener cierta edad y cierto peso. ¡Y ser elegidos! Los americanos tienen un montón de posibilidades para votar. ¡Incluso pueden hacerlo a través de la web de la Casa Blanca!
Bien, pues esta mañana ha tenido lugar esta ceremonia y el presidente Obama, acompañado por sus hijas y su mujer, ha indultado al pavo: quedaban dos candidatos finalistas “Popcorn» y «Caramel», que nacieron el 8 de julio en una granja de Badger (Minesota), tienen 19 semanas, miden unos 60 centímetros y pesan alrededor de 17 kilos y los han alimentado a base en maíz y soja. Ha resultado ganador el pavo «Popcorn»: ¡un campeón!
¡Aquí van dos enlaces para los más curiosos!
http://www.whitehouse.gov/blog/2013/11/27/presidential-turkey-pardon-curious-if-humane-tradition
http://elpais.com/elpais/2013/11/26/gente/1385496198_261270.html