Seguramente que en algún medio alguien titulará que el Papa ha vuelto a saltarse o a romper el protocolo e ilustrará el texto con esta foto…

…pero, como mucho, habrá dado algún que otro quebradero de cabeza a los guardaespaldas y personal de seguridad del Vaticano o, ya puestos en lo peor, algún dolor de estómago porque le sentara mal el mate…