Con la mantilla a vueltas
Se acerca la Semana Santa y se acercan las procesiones. Los medios de comunicación empiezan a llenarse de informaciones al respecto: se publican calendarios, recorridos y los ciudadanos se preparan para participar de una tradición y unas ceremonias que gozan de enorme popularidad.
También, claro está, buscan aquellos detalles que puedan tener más tirón mediático y entre los de estos últimos días, el premio gordo se lo ha llevado la indumentaria de las “Damas de Mantilla”, que procesionan con sus cofradías en Semana Santa. Para empezar, ¿qué es lo que lleva puesto una de estas mujeres? Es bien sencillo: evidentemente, la mantilla negra o blanca, la peineta de nácar (o teja), el broche de plata, y el traje con falda o vestido, negro o del color que requiera la procesión.
¿Y cuál es el problema? Pues las recomendaciones que al respecto ha hecho la Junta Mayor de Hermandades y Cofradías de la Semana Santa de Alicante, que dirige Alberto Payá: ha recomendado “decoro” a las mujeres que vayan a participar este año en las procesiones. Con ello la polémica está servida. En una sociedad en la que la indumentaria ha perdido importancia ¡sólo faltaba que se prohibieran escotes, largos de falda o maquillaje!
Hemos querido consultar los reglamentos de la Junta, pues a ellos remite el presidente, pero, curiosamente, este documento no está. Otros de la página sí pueden consultarse.
http://www.semanasanta-alicante.com/Paginas/junta_mayor-I55.html
Hemos tenido que informarnos en los digitales y otras webs qué era exactamente lo que se requería y, en resumen, hemos podido saber que “tienen prohibido ir con falda más corta de la rodilla, llevar escote y medias de rejilla.Otros de los requisitos para que las “damas de mantilla” de negro participen en las procesiones son que lleven moño bajo o a media altura para sujetar la peineta, que el maquillaje sea sin estridencias y “lo más claro posible”, evitando el color rojo, que los vestidos no sean ceñidos y que no lleven guantes largos.”
No vamos a juzgarlo: no es nuestro cometido. A efectos protocolarios, la etiqueta requerida para un acto debería cumplirse y si nos parece mal que se haga en otros actos, en éstos, también. Las cofradías tienen sus reglamentos y a ellos hay que atenerse. Es de suponer, que dado el carácter de una procesión serán similares en toda España. Pues no tendría mucho sentido que en unas ciudades las Damas pudieran lucir minifalda y escote, y en otras, no.
Claro, que si se trata de promoción y con ello de ingresos, podemos hacer la vista gorda ¡y el escote largo…!
Foto: Vanitatis
http://jaststyle.com/2014/04/23/una-tradicion-espanola-dama-de-mantilla/
http://infovaticana.com/blog/el-olivo/2015/03/11/normas-para-las-damas-de-mantilla-en-alicante/
