
Corte y Casa del Reino de Nevera
En estos días de confinamiento por el coronavirus, de entre todos los entretenimientos con los que nos ayudamos a pasar el tiempo hay uno cuyo protagonismo es innegable: el majestuoso Reino de Nevera. Tan importante reino, del que depende además la Señora Cocina, tiene su corte y su casa. La organización de estas es fundamental para que el asunto de la alimentación familiar sea sano, saludable y ajustado al presupuesto. Cual corte real, en ésta también la jerarquía es la base de la organización. Y a todos estos gajes, títulos y etiquetas vamos a dedicar nuestro post de hoy.
La alta nobleza del Reino de Nevera
En todas partes, también en el reino helado de la Reina Nevera, las clases altas tienen un estatus privilegiado. Para la Nobleza Verdulera están reservados estupendos «palacios» aireados y protegidos de las malas influencias. En el principal de esta corte moran la duquesa Verdura de Hoja, y sus ilustres y linajudos hijos, doña Lechuga, doña Remolacha, don Repollo, doña Coliflor y doña Lombarda. Comparten rango y palaciegos aposentos con las Marquesas de Alcachofa y Espárragos (familias Blancos y Verdes), la vizcondesa Endivia de Brócoli, las Señoras Coles de Bruselas; S.A.S doña Zanahoria de Apio y Guisante y los príncipes don Rábano, don Puerro y don Nabo. Dada la amplitud de los territorios y fincas se instalaron en holgada fortaleza cercana los Condes de Cebolleta y Berro, con sus ilustres hijos don Champiñón Blanco y doña Maíz Natural. Menos extenso son los predios de las baronesas de Especias a las que no puede acompañar su sobrina doña Albahaca de Pesto, que recientemente se mudó a otro país.
De la familia de los Condes de Frutas de Temporada han podido instalarse en el Reino de Nevera, las ilustres familias condales de Manzanas, aunque no deberían pasar más de siete días en sus dominios, porque no les acaban de sentar bien los aires. No es el caso de las Marquesas de Albaricoques, de Moras, de Arándanos y de Cerezas que encuentran encantador el estante. El problema de las familias divididas -cortadas o troceadas por brutales guerras de cuchillos largos- ha ocasionado más de un quebradero de cabeza, pero se ha conseguido ubicarlas en contenedores prefabricados de cristal o plástico, bien cubiertas y de diseños modernos y adecuados a su condición. En sus bonitas casitas acristaladas no faltan los letreros a la puerta: Villa Frambuesa, La Casita de la Uvas, Mi Fresón; El Palacio de los Higos…¡incluso con la fecha de construcción para que todos sepan cuándo se mudaron al Reino de Nevera! Un detalle fino, sin duda. Y con claras influencias de la aristocracia británica que aboga por el FIFO*, tendencia muy actual en nuestra nobleza donde ya se conoce como PEPS**.
Es evidente, que estos rangos de tan alta categoría gozan de una higiene admirable. Siempre limpias y aseadas, no entran en sus casas sin haberse lavado a fondo: ¡que ninguna quiere contagiarse de coronavirus! Y si hace falta, por el motivo que sea y en el que no nos vamos a detener, se ponen en contacto con doña Lejía Alimentaria, que siempre es una brillante solución.
Los bajos fondos del Reino de Nevera
Dejamos a la nobleza bien asentada y nos acercamos a los bajos fondos. Son los lugares más fríos del Reino de Nevera. Aquí habitan hidalgos marinos de aspecto tenebroso y Señores de la Guerra: OrlandoTernera de Vaca, Nuño Lomo de Cerdo, Teobaldo Ave de Corral o Gundisalvo Chuleta de Cordero cuyos méritos son tan discutidos que es frecuente que acaben en la hoguera. Y si alguno volviera de allí, requemado, asado, guisado o cocido, ocuparía un espacio distinto, alejado de los que aún no han pasado por el fuego. ¡Contaminan a los aseados habitantes de los rangos superiores a los que además les protege la Ley HACCP***! Los muy listucos se han agenciado un sistema de defensa, que de momento, es invencible. Y, claro, que para no verles la mala cara que se les ha puesto, conviene tapársela con velos de aluminio, embozos de plástico o sobreros de ala muy ancha.
Gremios en el Reino de Nevera
Para que subsista nuestra organización hay que contar con los gremios. El Reino de Nevera tiene que poder exportar a Doña Cocina no sólo a la alta nobleza, aseada, conservada y mantenida en las mejores condiciones. También debe poder suministrar servidores de todo tipo y pelaje. Y en este punto, etiquetaremos a los Gremios. Situamos al Gremio de los Lácteos -que es generalmente muy grande- entre la alta nobleza y los bajos fondos. Y juntos, es más sencillo negociar con las familias de Queseros, de Nateros o de Yogurteros cuando están en el mismo sector o barrio del reino. Si, por ejemplo, se han fugado los Mantequilleros, se nota enseguida su ausencia al ver el hueco y es sencillo salir en su busca. Y si se ponen muy farrucos, y no quieren volver porque se sientan menospreciados, se les sustituye por los Margarineros y se acabó el abismo. Sin embargo, sus Maestros Mayores, doña Botella de Leche y sus primas señoras Semidesnatada y Sin Lactosa, es mejor que controlen a sus menores desde los límites de las fronteras del reino, junto a doña Jarra de Agua o don Refresco de Cola. Allí en las regiones de los Portones y Puertas, se asienta también el Gremio de Salseros. Es difícil controlar a los jóvenes Ketchup, Mayonesa y Mostaza…¡quieren estar en todas las fiestas y no se pierden un banquete!
Los expulsados del Reino de la Nevera
Aunque nos duela reconocerlo, en el idílico Reino de Nevera también hay desterrados. No hay sitio para los Marqueses de los Huevos…si vienen de territorios de temperatura ambiental, ¿para qué quieren solar reservado en un lugar tan freco? ¡Si no baja de 5 graditos ni en verano!
*siglas en inglés de «First In, First Out» : el lote de stock que primero entra es el que primero sale. Es el método más utilizado para los productos perecederos como los alimentos que tienen fecha de caducidad.
** PEPS : «Primero En Entrar, Primero en Salir»
***siglas en ingles de «Hazard Analysis and Critical Control Points» o Análisis de Riesgos y de Puntos Críticos de Control; es un sistema de seguridad alimentaria con la que se previene poner en riesgo la seguridad de alimentos. Los alimentos elaborados deben colocarse encima de los no elaborados o crudos para evitar la contaminación cruzada de un no elaborado.
(Fotos: verduras; frutas; carnes y pescados; lácteos; huevos, portada)
(Agradecemos el asesoramiento alimentario a SDLS, director de hotel.)