Sancionar no es poner una multa
No hay palabra más traída y llevada esta semana que sanción. Y aunque creamos que es “1. f. Pena que una ley o un reglamento establece para sus infractores” (RAE), en el caso de la ceremonia solemne de esta tarde, se trata de “3. f. Acto solemne por el que el jefe del Estado confirma una ley o estatuto” (RAE). Es, por tanto, un acto muy protocolario.
La invitación se ha adelantado por correo electrónico: en carta avisando que “el Jefe de la Casa de S.M. el Rey traslada una invitación para asistir a la Ceremonia de Sanción y Promulgación de la Ley Orgánica por la que se hace efectiva la abdicación de Su Majestad el Rey Don Juan Carlos I de Borbón”.
Siguiendo las pautas que manda una buena organización de actos, se ha hecho llegar a los invitados una Nota de Protocolo con información de interés para los que asisten. Dado que la cita es en el Palacio Real de Madrid, hoy 18 de junio de 2014, a las 18,00 horas, en dicha nota se ruega a los invitados que “a la mayor brevedad posible” confirmen su asistencia bien a una dirección de e-mail, bien a un teléfono.
Se les advierte también que “la etiqueta fijada es traje oscuro para los señores y vestido corto para las señoras” y que no está “prevista la asistencia de acompañantes”.
Para que no haya aglomeraciones y carreras de última hora, pero sobre todo para tener tiempo de ubicar a cada uno en su sitio y dejar el “espacio escénico” limpio para que se vea bien la función, se ha rogado a los invitados que se personen “en Palacio antes de las 17,30 horas del miércoles 18 de junio de 2014”.
Tanto la seguridad como la facilidad para los accesos se ha cuidado con esmero y se han cursado instrucciones para que no haya duda alguna:
-no se entra a Palacio sin presentar la carta/invitación, la tarjeta de aparcamiento y el DNI o pasaporte;
-los coches accederán por la Puerta de la Armería ( previamente hay que haber mandado los datos del vehículo (marca, modelo y matrícula);
-si se lleva conductor, además, sus datos (nombre y d.n.i.).
-y si, más modestamente, se llega a pie: “se ruega el uso de la Puerta del Arco de Santiago”.