Código informal
Llega el momento de tirar de estadísticas: dado que en el horario de verano el resumen de la semana toca los lunes, vamos a ver quienes son los campeones: oro y plata en plena ola de calor donde lo que menos apetece es ponerse a leer y lo que más…¡meterse en agua helada!
Pero, las costumbres y tradiciones son sagradas -y mucho más en protocolo-, así que aquí están los ganadores.
El primer puesto es para la entrada «Código de protocolo»:
//protocoloalavista.com/2015/07/09/codigo-de-protocolo/
una reflexión sobre la utilidad y el valor de una disciplina que «no se ve, pero se nota» y que ayuda a todos a sentirnos relajados y atentos al acto al que acudimos por la seguridad que nos aporta. Es verdad que a los protocoleros nos despachan con un «acomodadores de lujo», pero cualquiera de vosotros, seguidores fieles e imprescindibles, ya sabéis que eso es quedarse con la punta del iceberg y no mirar debajo del agua. ¡¡Servimos para mucho más y nuestro trabajo a la vista queda!!
El segundo puesto de nuestro ranking semanal es para la informal forma de jurar del Senador Espinar.
//protocoloalavista.com/2015/07/17/arreglado-pero-informal-2/
El señor Senador juró su cargo ante el pleno del Senado igual que si estuviera comentando un programa de la tele con un amigo: manos a la cadera, vaquero y camisa. Explicar a estas alturas que lo de «campo y playa» no es lo más adecuado para este tipo de actos, ya nos parece mucho; constatar que la actitud del senador era chulesca, nos parece increíble. El desprecio de esa pose simplemente reproduce su concepción del estado y su idea de lo poco que merecen las instituciones, que, encima, les acogen y les dan tribuna para expresarlas. No es cuestión de «somos unos antiguos»: es cuestión de respeto. De respeto por todos nosotros que somos a los que él y todos los políticos, nos deben el puesto.
¡Feliz semana a todos!
