Invitaciones a «cholón»
No se puede decir más claro: esta semana, las entradas que se han llevado el gato al agua han sido las de las invitaciones. Su uso es tan habitual y hay tanta variedad en el mercado, que muchas, muchas veces, se guía uno más por la estética o por la originalidad a la hora de redactarlas que por lo que realmente se debería, pues no dejan de ser una manera de comunicar un evento y da dar a los invitados la información necesaria para que puedan acudir o, en caso de no poder hacerlo, para que puedan avisar. Hay que tratar de ser muy claros, no olvidar lo más importante y ¡no hacer de la invitación un galimatías!
La genérica primera parte de las dos que hemos dedicado estas semanas a la forma y el contenido que deberían tener las invitaciones, ha sido la número uno del ranking. Pero automáticamente detrás está el resumen de la semana anterior en el que os contábamos que justo esa entrada y la de las banderas mal ordenadas en la CRUE habían sido las dos más vistas.
La ordenación de las banderas es un asunto que nos trae locos. No hay semana en la que no veamos algún desaguisado banderil: la creatividad a la hora de ordenarlas es impresionante. ¡Ojalá fueran tan originales para otras cosas y no para una que está regulada por ley!