Adiós al “estar de andar por casa”

Adiós al “estar de andar por casa”

Llevamos muchas semanas trabajando en casa y lo primero, lo primero que ha hecho la mayoría es no vestirse. Vamos todos de “andar por casa“, que es una categoría aparte en la escala de la solemnidad indumentaria. Si el frac es lo máximo, esta modalidad hay que situarla por debajo del límite de lo informal o de lo deportivo. Y casi, ni eso.

Hemos recuperado todo tipo de camisetas viejas -más bien “sobaditas” y ajadas-,  pantalones de chándal que ya ni nos atrevíamos a llevar por la calle, mallas gastadas, vaqueros recortados, bermudas raídas …. ¡todo una elenco de estrellas del fondo, fondísimo, de armario! Eso los más “elegantes”. Siempre hay quien ni se ha quitado el pijama. Si no hay imagen…¡todo vale! Habiéndola también ha habido quien ha dado la nota, así que sin ella…¡las redes contaban grandes historias de la nueva “moda de andar por casa” !

Dado que ya se acabó el teletrabajo -al menos para mucha gente- y volvemos a las oficinas y despachos, vamos a recordar qué podemos lucir para encarar la jornada de trabajo y de calor veraniego con cierta comodidad. Y como no todos los trabajos exigen lo mismo, graduamos la vestimenta en función de lo que cada una de nuestras empresas demande: no es lo mismo estar cara al público, que trabajar en una multinacional informática. Aun así, hay un mínimo: vestir adecuadamente es una muestra de respeto hacia los demás.

¡Entre andar por casa y la formalidad hay un trecho…

Hay muchas personas que trabajan cara al cliente. Un banco, unos grandes almacenes, una oficina de atención al público…¡seguro que se nos ocurren más! Son los que requieren una mayor formalidad. Puede ser que alguna de estas empresas tengan uniforme para sus empleados: es una forma de evitar problemas de malos entendidos. Pues cada uno tendemos a entender los conceptos de forma diferente. Por tanto, y sirviéndonos de ejemplo  ese tipo de vestimenta,  lo más sencillo es aplicar los mismos criterios que se utilizan para la uniformidad veraniega: tejidos de los trajes y chaquetas más ligeros y camisas de manga corta. Ellas sin medias, pero ellos deberían llevar calcetines. Aunque se haya puesto de moda lucir el tobillo…

Para los hombrestrajes frescos y de colores más claros, si quitarse la corbata no es una opción. Si en vez del clásico traje masculino -pantalón y chaqueta iguales- se prefiere combinar ambas prendas, hay americanas de hilo o de algodón, por ejemplo, para combinar con diferentes pantalones. Lo más importante en estos casos es encontrar el tejido adecuado. Por suerte hay mucha oferta.

   

Para las mujeres: para aquellas que no pueden renunciar al traje de chaqueta también, como en el caso de los hombres, los hay pensados para el verano. De formas similares a los modelos y diseños de invierno, muchos de ellos con manga corta, y confeccionados con tejidos más frescos. Los estampados y los colores más claros es lo que marca la diferencia. Si se prefieren con pantalón, hay que recordar que deben ser de vestir. Son adecuados también los vestidos, siempre y cuando no sean playeros, con chaqueta a juego o entonada. Nos ha costado encontrar estas combinaciones en los catálogos de tendencias de este año: las faldas son escasas…¡manda el pantalón! Tobillero o bermuda.

…y entre andar por casa y cierta informalidad, también!

Para los hombres: que pueden prescindir del traje, (del que conviene recordar que no por quitarse la corbata se pasa de formal a informal) la opción son los pantalones de pinzas, planchados, o incluso “tipo chinos” de algodón, también de colores claros, y camisas tipo polo. Nosotros no somos muy fans de las camisas de manga corta, pero es una cuestión personal. Es una prenda más para ir alternando con el “polo”. El calzado adecuado es el mocasín. En verano son muy agradecidos los de ante, piel vuelta o nobuk.

Para las mujeres: la prenda estrella en la oficina en verano es el vestido. De manga corta, colores y estampados, diseños y formas variadas. Largo a la rodilla o justo por debajo, zapato plano, de tacón medio o sandalias (¡no olvidarse de la pedicura y de los talones!!) Los de tirantes, mejor no.

Perfecta es también la combinación de falda o pantalón con blusas o camisas de hilo, algodón, lino o cualquier tejido fresco.

A trabajar no se va de “andar por casa”…

…por mucho que nos hayamos acostumbrado, aunque estemos trabajando a turnos y haya menos personal, o  por mucho calor que haga. Es básico tener claro lo que no debe lucirse:

los hombres: deberían olvidarse de pantalones cortos, del tipo “bermudas” o “piratas”; camisetas -ni lisas, ni con dibujos-; sandalias -con y sin calcetines-, chanclas,  “deportivas” de todo tipo y gorras.

   

Las mujeres: siempre es más difícil delimitar la indumentaria femenina adecuada para cualquier circunstancia porque la moda manda mucho en el armario femenino. Pero aun así, deberían evitarse los pantalones muy cortos, tipo short; los vestidos con tirantes de estilo muy playero; los tops que enseñan ombligo; el largo “muy mini” y las chanclas, aunque ¡menuda pelea cuando las sandalias son de “de dedo”! No son lo mismo.

Es verdad que no todas las oficinas son iguales y que no en todas partes se tolera lo mismo. Cada uno de nosotros sabemos en qué tipo de empresa trabajamos. A ella adaptaremos nuestra ropa en verano. Y aunque la moda cuenta,  la etiqueta no varía. Las tendencias de cada momento no aplican. Nada asegura que dentro de un tiempo las cosas sean otras, pero hoy por hoy, algunos pueden jugarse el puesto de trabajo por estar a la última. Como ya escribimos en enero de 2017: moda y protocolo no son palabras sinónimas. Y etiqueta, tampoco….

No es muy complicado. Sólo hay que ponerse a ello. Si tanto nos gusta preparar los atuendos maravillosos que buscamos para ir de fiesta… ¡lo mismo deberíamos hacer para ir a trabajar! Es bastante más frecuente vestirse para ir a la oficina, que para ir de boda.

 

 

(Fotos: portadaformal hombre; Formal mujer: traje de chaqueta con  falda; vestido con chaqueta; traje pantalón gris, traje bermuda rosa; Informal hombre: chino gris; chino beige; Informal mujer: vestido lino con cinturón; vestido estampado; lo que no se debe lucir: hombre; mujer; traje de hombre con bermudas).